Instrucciones:
Prepara la corteza: Precalienta el horno a 350 °F (175 °C). En un bol, combina las galletas Oreo trituradas y la mantequilla derretida. Presiona la mezcla de manera uniforme en el fondo de un molde desmontable. Hornea durante 10 minutos y luego deja enfriar por completo.
Prepara el relleno: en un tazón grande, bate el queso crema ablandado y el azúcar hasta que quede suave. Incorpora el extracto de vainilla y bate. Agrega los huevos uno a la vez, batiendo bien después de cada adición. Incorpora la crema agria, la crema espesa y el cacao en polvo oscuro hasta que se combinen.
Arma la tarta de queso: vierte el relleno sobre la corteza enfriada. Hornea durante 50 a 60 minutos o hasta que el centro esté ligeramente firme pero aún se mueva levemente. Deja que la tarta de queso se enfríe por completo a temperatura ambiente y luego refrigera durante al menos 4 horas o durante la noche.
Prepara el glaseado de terciopelo negro: en una cacerola, calienta la crema espesa a fuego medio hasta que hierva a fuego lento. Retira del fuego y agrega el chocolate negro picado, el cacao en polvo negro y la manteca hasta que quede suave y derretido. Deja que el glaseado se enfríe un poco, hasta que espese hasta tener una consistencia que se pueda verter.
Batir la cobertura: en un recipiente aparte, batir la nata espesa, el azúcar en polvo y el extracto de vainilla hasta que se formen picos firmes.
Para terminar: verter el glaseado de terciopelo negro sobre la tarta de queso fría, dejando que gotee por los lados. Colocar la nata montada encima con una manga pastelera o cucharadas y decorar con M&M’s y una pizca de cacao negro en polvo (opcional). Cortar en rodajas y servir frío.